Con cierta frecuencia, leemos con sorpresa en diarios que pretenden ser serios, cómo se frivoliza con los riesgos que entraña la carretera. Y recientemente, se ha hecho con una de las situaciones que entraña mayor peligro al circular con un vehículo. Nos referimos a viajar con el asfalto mojado, helado, con nieve… con un vehículo cuyos neumáticos no están en buen estado.
Si partimos de la base que transitar en estas condiciones meteorológicas desfavorables es un riesgo y ahí parece que todos estamos de acuerdo, no se entiende por qué se critica a los guardias civiles, que tienen como misión principal garantizar la seguridad en nuestras carreteras, por poner en marcha una campaña para controlar el estado de los neumáticos en una época del año donde la meteorología no suele ser favorable. Además, ¿no será que no se advirtió?, al contrario de lo que pretende hacer creer el susodicho diario.
Entendemos que la advertencia se hace en el momento que se informa en todos los medios que se va a llevar a cabo una campaña de control del estado de los neumáticos. Desconocemos qué publicidad hizo ‘El Correo Gallego’ de la mentada campaña para advertir a sus lectores, porque la información la tenían.
En APROGC creemos, porque esa es nuestra experiencia como guardias civiles, que el problema no es la posible sanción económica por tener unos neumáticos en mal estado, el verdadero problema y lo que de verdad “supone condenar a la miseria a muchas familias” (como decían en el diario El Correo Gallego en su sección “pólvora y magnolias” refiriéndose a la posible sanción económica) son las consecuencias que tienen los accidentes por haber perdido el control del vehículo por el mal estado de los neumáticos. Eso sí es grave y con consecuencias en muchas ocasiones irreversibles.
Los guardias civiles con esta campaña, solamente quieren concienciar que en condiciones de lluvia, la adherencia en el asfalto se reduce considerablemente, siendo ésta una de las situaciones más incómodas y que entraña más riesgo al circular. El único afán de los guardias civiles es el de “recaudar vidas” evitando las tragedias que suceden tras un accidente de circulación. Algo en lo que deberían colaborar todos los medios de comunicación social en lugar de criticar la labor que de forma abnegada y entregada realizan cada día los guardias civiles que prestan servicio en nuestras vías.
Los medios de comunicación tienen el poder de influir en la opinión pública por lo que quizá alguien debería plantearse lanzar una campaña de concienciación a determinados periodistas de los riegos y las tragedias que suceden sobre el asfalto cada día y que en su mayoría son evitables. Les invitamos a todos a unirse a la Guardia Civil en la mejora de la seguridad vial, aunque también nos conformamos con que no nos pongan piedras en el camino, o de acuerdo con el temas que nos trae, palos en las ruedas.
